Los cactus son originarios de América. Podemos encontrar cactus silvestres desde Canadá hasta Tierra del Fuego.
Los Cactus y otras Suculentas representan un grupo de fascinantes plantas.
Muchas especies tienen floraciones muy bellas.
Existe una gran variedad de formas en las Suculentas.
Las Plantas Suculentas, también llamadas Plantas Crasas se caracterizan por acumular agua en sus tallos, hojas o raíces; esto les permite aguantar períodos de sequía.
Estas plantas pertenecen a diferentes Familias botánicas: Cactus, Crasas, Euphorbias, Ágaves, Aloes, etc.
El cultivo de los Cactus y Suculentas no es, en general, complicado.
No se necesita mucho espacio para tener un buen surtido de Cactus y Suculentas.
Existen en el Mundo más de 2.500 especies distintas de cactus.
En cuanto a las Plantas Suculentas que NO son Cactus, hay más de 8.000 especies distintas.
Los siguientes consejos están basados en experiencias propias con buenos resultados, esperamos sean de ayuda:
Luz: Lo más importante para el buen crecimiento de los cactus es que tiene que tener muy buena luz solar. Un cactus a la sombra va a crecer débil, y es probable que agarren hongos y se pudran.
Riego: No existe una frecuencia exacta para los riegos, un riego semanal en verano, quincenal en otoño y primavera y esporádico en invierno (muy reducido y en días calidos), sería un consejo muy general. Conviene dejar la tierra seca entre riego y riego. Difícilmente mataremos a un cactus por falta de agua, pero sí por exceso. La mejor agua es el agua de lluvia.
Sustrato: En cuanto al sustrato debe ser poroso, permeable; el agua de riego debe desaparecer rápidamente para evitar el encharcamiento y permitir que el aire tenga fácil acceso a las raíces
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